Cualquier relación sexo-afectiva con otra persona, o con varias, debería aportarnos alegría, bienestar y crecimiento personal. Amar en pareja debe sumar cosas positivas a nuestras vidas. Sin embargo, no siempre es un camino de rosas.
La rutina en la convivencia, las diferentes etapas del ciclo de la pareja, los celos, la falta de deseo, la llegada de los hijos, etc., son situaciones que pueden hacernos darnos cuenta de que hay un desajuste de pareja.
Si no podemos encontrar maneras de enderezar esta incomodidad y de sentirnos mejor, es hora de ir a buscar ayuda especializada. No dejes que las cosas empeoren.